Sexualidad Somática
La Sexualidad puede llegar a ser muy compleja. Eso es lo que reflejan los relatos de las personas que acuden al Apoyo Sexual. Existen diferentes obstáculos, creencias, temores y complejos que experimentamos en relación a nuestra Sexualidad pues los estereotipos, la cultura, los tabúes, la tradición, los mitos... han generado grandes conflictos mentales, emocionales, somáticos y energéticos en nosotres. La Sexualidad Somática trae respuestas claras a todo esto.
El Apoyo Sexual que propongo surge como respuesta a estas problemáticas que personas sienten dentro de sí desde un abordaje somático, humano y amoroso. En un espacio de seguridad y confidencialidad, con los límites totalmente definidos, se abre una puerta a integrar las vivencias del Cuerpo, el Corazón y el Alma orgánica y suavemente.
El contexto de la Sexualidad Somática es de trabajo en el suelo, con esterillas, en contacto cuerpo a cuerpo, piel con piel, facilitando los procesos naturales del organismo, acompañando las memorias del trauma que afloran, comprendiendo los mecanismos defensivos que mente y soma generaron para subsistir, e integrando los registros reparativos que favorecen un estado de aceptación, plenitud, gozo y bienestar.
Los límites son necesarios y trabajo profundamente para que la persona que acude a la Sexualidad Somática experimente un marco seguro. El contacto siempre será bajo la concesión de un permiso revisable constantemente, y la desnudez es una autoescucha de las necesidades de la memoria de la piel. Por estos motivos a veces hay contacto y otra se requiere sostener las fronteras, a veces se muestra el cuerpo y otras necesita cubrir las heridas...
Por supuesto, el enfoque de Sexualidad Somática acoge a todo tipo de persona: císgenero, transgénero e intersexuales, sin importar la orientación sexual y la expresión de género. Si eres queer, no-binarie, agénero, asexual... también es para ti. Haré lo posible para adaptarme a tus preferencias y mantener un lenguaje inclusivo para ti.
El Apoyo Sexual con la Sexualidad Somática puede ser beneficioso para:
- Mejorar tu autoestima, aprender a aceptarte a ti misme
- Superar complejos físicos como los que percibes en tus genitales, tus pechos o tu complexión
- Reducir la inquietud y los miedos ante el Encuentro Íntimo con otras personas
- Explorar insatisfacciones relacionadas con la erección, la respuesta vaginal o la eyaculación así como los sentimientos derivados
- Integrar los diferentes sentimientos y/o pensamientos que se viven con culpa
- Trabajar en la integración de vivencias impactantes o experiencias de invasión emocional, física y/o sexual
- Abordar patrones de tensión en el cuerpo que limitan la expresión natural de la energía vital y la sexualidad
- Profundizar en la comprensión e integración de vivencias difíciles relacionadas con tu sexualidad, tu autoimagen o tu cuerpo
- Incorporar una visión de la sexualidad más libre, gozosa y sana (sex positive)
- Aumentar la sensibilidad global más allá del falocentrismo y el coitocentrismo
- Aceptar y validar tus gustos, fetiches y filias que podrías vivir con culpa o vergüenza
- Abordar la dependencia al sexo, al porno o a la masturbación
- Tomar las fuerzas necesarias para “salir del armario”, mostrando la expresión de género deseada
Este apoyo aúna recursos y conocimientos de varias disciplinas: toda la concepción del desarrollo evolutivo de la sexualidad del Análisis Bioenergético así como su rica gama de procesos corporales reparativos, toda la sabiduría y sensibilidad del enfoque somático y ‘embodiment’ que aporta la Sexological Bodywork, el trabajo de polaridades y de potencialidades de la Gestalt, la visión humana, cálida y afectiva de la Terapia del Reencuentro con su sensibilización, todo el trabajo del suelo pélvico de los Ejercicios de Kegel, la importancia de los valores que el Enfoque Gay Afirmativo aportan, y por supuesto todos los recursos que desde el Tantra nos llegan para conocer mejor el cuerpo, la sexualidad y el Amor Propio.
Las actividades ofrecidas se orientan al bienestar y desarrollo personal, no constituyen un tratamiento sanitario ni sustituyen la atención psicológica, sexología clínica o médica profesional. Mi actividad es la de “Facilitador de Procesos Somáticos” y no constituye una profesión sanitaria. En caso de necesitar atención médica, psicológica clínica o sexológica, debe acudir a los profesionales sanitarios correspondientes.